Un diagnóstico anticipado puede salvar vidas

Día Mundial contra el Cáncer de Mama

Cada 19 de octubre se conmemora el Día Internacional de la lucha contra el cáncer de mama. El objetivo principal es sensibilizar y llevar a la población un mensaje claro y que es clave en función de fomentar la prevención frente a esta enfermedad. Este día y prácticamente durante todo el mes de octubre, se releva la importancia de la detección precoz, a fin de mejorar el pronóstico y la supervivencia de los casos, lo cual sigue siendo la piedra angular de la lucha contra esta enfermedad, que representa la primera causa de muerte en la población femenina a nivel mundial, según fuentes de organismos internacionales de salud.

De acuerdo con los estudios realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) se estima que, cada año en América, son más de 462 mil mujeres diagnosticadas con cáncer de mama. El dato sobrecoge cuando se revela que son 100 mil las que mueren a causa de esta enfermedad. En América Latina y el Caribe, la estadística indica que el 56% de fallecimientos ocurre en mujeres menores de 65 años. Mientras que, en comparación con los Estados Unidos y Canadá, solo el 37% de los casos, la paciente fallece.

En Chile, según los datos durante el 2020, las muertes asociadas al cáncer de mamas, se elevó a 1.674 casos. Pero según los estudios la cifra podría aumentar a más de 2.600 para el año 2040, según las estimaciones de la OMS. En este sentido, la pandemia producto del COVID 19, tuvo un fuerte impacto en este sentido. La realización del examen de mamografías disminuyó en un 60%, durante este periodo. Por otra parte, el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) de la Universidad de Chile señala que “el cáncer de mama es el tumor más frecuente en las mujeres chilenas y también es el que produce una mayor cantidad de muertes cada año.” (U de Chile, octubre 2021), situándose como la segunda causa de muerte en mujeres, siendo superado solo por el cáncer de pulmón e hígado. Este escenario llevó a que el año 2015, se incorpore el cáncer de mama en personas de 15 años y más al primer régimen de Garantías Explícitas de Salud (GES).

La importancia del diagnóstico precoz

Las instituciones especializadas, aseguran que la detección temprana de esta enfermedad y el inicio de un tratamiento aumenta la sobrevida entre un 90% y un 95%. No obstante, a ello, el cáncer de mama es generalmente asintomático y en el 80% de los casos, las pacientes que lo padecen no tienen antecedentes familiares que puedan de alguna manera alertar sobre la posibilidad de tener la enfermedad. Por lo mismo, es en estos escenarios, donde toma importancia y relevancia el auto chequeo y las mamografías periódicas después de los 40 años de edad.

A esta altura la pregunta es simple ¿Cómo detectar a tiempo esta enfermedad? Si bien, en diferentes portales de internet, los consejos de los y las especialistas son claros frente al examen preventivo, es importante señalar algunas señales de advertencia sobre el cáncer de mama que se podrían detectar con el autoexamen. Por ejemplo: la detección de un bulto nuevo en la mama o la axila, son señales a las que se les debe prestar atención. Al mismo tiempo, el aumento del grosor o hinchazón de una parte de la mama o la irritación o hundimientos en la piel de la mama, también son signos de alerta. Por último, el enrojecimiento o descamación en la zona del pezón o la mama o l hundimiento del pezón o dolor en esa zona, deben poner en alerta, al momento de la realización del autoexamen.

Según fuentes del Ministerio de Salud, el cáncer de mama es considerado uno de los principales problemas de salud pública en el mundo, y en Chile, particularmente es la primera causa de muerte de mujeres en edad reproductiva. Por lo mismo es una de las patologías que está incluida en el plan de Garantías Explícitas en Salud (AUGE o GES).

En este sentido, es importante que la población sepa que la realización de la mamografía es copago cero para todas las personas inscritas en Fonasa, cuando programan el examen en centro de salud del sistema público como los cesfam, consultorios, Centro de Diagnóstico Terapéutico, Centro de Referencia de Salud u hospitales. (fuente Chileatiende.gob.cl)

Según indica este mismo portal, toda mujer entre 50 y 69 años de edad, tiene derecho a una mamografía gratis cada 3 años y quienes soliciten la realización del examen preventivo de mamografía no necesitarán una orden médica previa.

Estudios demuestran

Diferentes estudios demuestran que el riesgo de tener cáncer de mama es una combinación de factores, los que incluyen una edad avanzada, primera menstruación a temprana edad, edad avanzada en el momento del primer parto y antecedentes familiares de cáncer de mama. Sin embargo, es importante entender que el tener un factor de riesgo no significa que la persona tendrá la enfermedad, y no todos tienen el mismo efecto, por lo mismo, los exámenes de autoexploración, la realización periódica de la mamografía y la visita a especialistas, toman relevancia para la prevención y la obtención de mejores resultados.

Luego que la mujer cumple 20 años, se hace necesario que regularmente efectué el examen de autoexploración de la mama, de manera regular para detectar el posible cáncer en una etapa temprana. De esta manera se podría tratar con la expectativa de mejores resultados. Si bien no todos los casos de cáncer pueden detectarse de esta forma, es un paso importante que se debe realizar. Es importante recordar que los pechos albergan las glándulas mamarias que tienen pequeñas bolitas de forma natural, por lo que se debe tener cuidado y diferenciar entre un bulto o una parte de la glándula.

Mortalidad en Chile

En Chile, la información sobre defunciones y tasas de mortalidad son calculadas y publicadas por el Departamento de Estadísticas e Información de Salud de la División de Planificación Sanitaria (DEIS) de la Subsecretaria de Salud Pública del MINSAL, teniendo como fuente el sistema de hechos vitales, de la base de datos de defunciones del DEIS, MINSAL.  La tasa cruda de mortalidad corresponde al número de defunciones por cada 100.000 personas, utilizando como denominador en el cálculo la población proyectada (hombres y mujeres) por el INE para cada año en base al Censo 2017. De acuerdo con la información publicada por el DEIS, en el año 2020 (último dato disponible, marzo 2023) el número de personas fallecidas por cáncer de mama fue de 1.657 personas, con una tasa de mortalidad correspondiente a 8,52 defunciones por cada 100.000 habitantes. (Reporte para Chile DEIS-MINSAL)

Experiencia en carne propia

Nunca esta expresión adquiere tanto valor. Conversamos con “Irene” una iquiqueña que fue diagnosticada de cáncer y hoy, luego de operaciones y tratamientos, está saliendo adelante. Actualmente tiene 55 años y desde el 2015 le ha dado pelea a una de las enfermedades que más víctimas femeninas ha cobrado en Chile.

Irene nos comentó que, al cumplir 40 años, comenzó con las rutinas de exámenes recomendados. “Desde que cumplí cuarenta años, comencé a realizarme los exámenes de mamografías y ecotomografías de manera regular. Como se debe hacer. Además, realizaba el autoexamen de manera periódica y gracias a eso, detecté una pequeña extraña protuberancia”.

“Luego del autoexamen, me realicé algunos exámenes y fui a mi doctor para que fueran evaluados. Lamentablemente, dos médicos en la ciudad de Iquique me dijeron que no se apreciaba nada extraño. Que no tenía nada. Esto fue más o menos en septiembre. Me quedé tranquila, pero seguí realizando el autoexamen de manera regular. En diciembre de ese mismo año, la protuberancia seguía ahí e incluso un poco más grande”.

Nos cuenta Irene que en ese momento decidió realizarse nuevos exámenes, ahora en Santiago y para su sorpresa, esta vez el diagnóstico fue diferente, totalmente diferente. “Yo sentía que no estaba todo bien como me habían dicho y tomé la decisión de viajar a Santiago. Allá me realizaron nuevos exámenes, dado que los que me había hecho acá en Iquique, las imágenes no eran buenas o claras y se debían hacer nuevamente”.

Hablar de cáncer tiene una fuerte carga negativa y de fatalidad. Cáncer es sinónimo de muerte, desesperanza, altos costos económicos y largos periodos de tratamiento. Un diagnóstico de cáncer es sin dudas una noticia fuerte hasta difícil de aceptar. Irene, nos comenta, “cuando me hice la biopsia en Santiago, la doctora me dice que una vez que estén los resultados me llamaría. Cuando me llamaron, me dijeron que la doctora quería hablar conmigo en persona. En ese minuto estaba con almorzando con un grupo de amigas del trabajo y me cuentan que automáticamente me puse pálida. Yo estaba en Iquique y debía viajar a Santiago lo más pronto posible. Arme todo para viajar rápido y ya en la consulta de la doctora, me confirma que tenía cáncer”.

“Es muy fuerte cuando te dicen – tienes cáncer – se asocia de inmediato a la muerte. Ahí comienza un duro camino por salvarte”, nos asegura Irene. ¿Cómo es ese camino, a partir del diagnóstico?  Es una noticia que te afecta mucho, afecta un montón. Y luego la intervención… te sacan una parte, te matan en el fondo, porque una piensa que dejas de ser mujer. Me afecto un poco mi idea de femineidad. Yo tuve una primera intervención donde supuestamente habían sacado el nódulo, pero luego de la biopsia salió que ya se había diseminado por toda la mama. Ahí es cuando el doctor me dijo que había dos opciones. La primera era ir sacando de a poco, como ir escarbando parte por parte o hacíamos mastectomía radical. ¿Cómo se toma una decisión como esta? Es una decisión complicada, pero la tomé sola. Justo en ese momento, la relación de pareja que tenía estaba terminando, así que la decisión final de la intervención la tome solo yo. El proceso de aceptación en este momento ¿Cómo se hace? En ese minuto como que no hay tiempo para pensar en muchas cosas, más que aceptar lo que está pasando. Cuesta mucho. Mi me médico me sugirió que pasara por sesiones con psicólogos y así, enfrentar de mejor manera esta situación. Incluso en una oportunidad, conversé con una señora que coincidimos en la clínica y ella me comentó como ella pudo superarlo. Me conversó de lo que ella había pasado, de como salió adelante y que cosas hizo para sobrellevar esta enfermedad.

“Yo lo único que quería era regresar a Iquique. En Santiago estaba sola y sin red de apoyo o afectos. Creo que eso era una de las cosas que más me dolía, me daba pena estar sola. La enfermedad la acepté y en cierta forma, ahora que ya ha pasado el tiempo, nunca renegué contra alguien o algo, o contra el universo o Dios. Nunca dije porque a mí o simplemente ¿por qué?”. Al contrario, agradecí porque me sirvió para ver la vida desde otra vereda, desde otro punto de vista. Hoy de verdad toma relevancia tomarte una taza de té. Levantarte en la mañana y dar gracias porque esta viva”. “Son muchas cosas que te pasan y que te dan cuenta de lo importante de cosas simples. Se llora harto. En caso lloré harto, pero en soledad. No quería involucrar mucho a la gente para que no estuvieran tristes”.

Ya han pasado 8 años desde que Irene fue diagnosticada con cáncer de mama y hoy, en retrospectiva nos cuenta que “siento que soy una mujer resiliente. Tuve que enfrentar otras situaciones de salud, que también te afecta como mujer. He sufrido pérdidas importantes en mi vida, que hacen que el cáncer, como que pasa a ser parte de ti. Aunque todavía estoy en tratamiento, no me han dado el alta definitiva, debo estar siempre alerta. Me hago los exámenes rigorosamente y tomándome mis medicamentos”.

Después de todas las intervenciones a las que Irene tuvo que someterse, entró en un proceso denominado “reconstrucción”. Esto significa que se instala un implante mamario y que “ayuda mucho a mirarte al espejo, ver tus cicatrices y sirve para aceptarte. Aceptas tu cuerpo, como es, y te das cuenta de que de cualquier forma sigues siendo femenina, sigues siendo mujer y así ayuda también a entender que si hay una persona que esté a tu lado, te debe aceptar así. 

El caso de Irene es en particular especial. Los médicos en una primera instancia (septiembre 2015) le dieron un diagnóstico que hasta esa fecha era muy alentador. No obstante, y ante sus dudas, dudas que, gracias al tacto realizado con el auto examen, en diciembre viajaban a Santiago, donde es definitivamente diagnosticada con cáncer. “La realización del autoexamen es super importante, porque a partir de ahí te puedes dar cuenta si tienes algo extraño en tu cuerpo. A partir de ahí, seguir con los exámenes preventivos. Pero es importante partir con el autoexamen”. “Yo sé que esto puede volver o tal vez no. Pero hoy, siempre estoy alerta en ese sentido. Estoy atenta a mis medicamentos, mis controles, etc.; porque tengo nietos y quiero verlos grandes, quiero verlos crecer. En cierta forma ellos son mi motor de vida para avanzar todos los días”.

Quizás uno de los elementos más peligrosos del cáncer es la desinformación, por eso el llamado es al constante chequeo y a la prevención, para que esta frase “Estoy viva” tome fuerza, tome relevancia no sólo en un día o en un mes del año, sino que siempre y para toda la vida.