Lo mostrado por Deportes Iquique en el partido frente a la Universidad de
Chile, actual puntero del torneo nacional del fútbol chileno, renovó la ilusión
de ver al equipo celestes bregando por el primer lugar de la tabla de
posiciones, después de haber experimentado duros reveses en fechas
anteriores, donde había perdido 3 partidos consecutivos.
Pese a que, para el partido jugado ayer en el estadio Ester Roa de
Concepción, Miguel Ramírez no pudo contar con dos piezas fundamentales
para el ataque, como lo son Steffan Pino y Edson Puch, el técnico celeste
pudo disponer de una formación que inquietó a los azules, haciendo pensar
que podía quedarse con los tres puntos.
Es más, el resentimiento experimentado por Lázaro Romero, momentos
antes de iniciarse el encuentro, privó a Deportes Iquique de contar con un
elemento más en la parte ofensiva.
Los goles marcados por Ramos y Orellana que permitieron mantener por
momentos una ventaja de 2 -0 y en jaque al elenco universitario, dejaron de
manifiesto que el cuadro que dirige Miguel Ramírez, está para cosas mayores
y en condiciones de brindar grandes satisfacciones a la hinchada iquiqueña.
Mérito especial para Alvaro “Chanchito “Ramos, al igual la marca histórica de
Manuel Villalobos como goleador histórico de Deportes Iquique con 82 goles,
cifra que, sin dudas, podrá superar en las próximas fechas. Ramos fue elegido
en la transmisión televisiva, como el mejor jugador de la cancha.
Mención aparte para el árbitro del encuentro Diego Flores, con decisiones
que hicieron dudar de su imparcialidad, especialmente porque algunos de
sus “cobros y no cobros”, perjudicaron abiertamente a Deportes Iquique.